Esa situación es más frecuente y chocante en Senegal porque son los residuos que demarcan las regiones. Nos acojan al entrar y al salir. Así, la crisis ecológica de Gandiol se caracteriza por la ausencia de concientización de la población para una buena gestión de residuos.
Los residuos son de origen doméstico o plástico y siguen visibles por todos lados (casas, plazas públicas tal como en las playas de Gandiol). Las personas que buscan ideas para deshacerse (quemar o enterrarlos) de este problema son muy escasas. Sin embargo, la ONG Hahatay intenta encontrar una respuesta a esa crisis. Organiza por ejemplo días de limpieza por todo el pueblo para hacer arte con los residuos. Siendo jóvenes y comprometidos, conscientes y advertidos, hemos empezado a reflexionar para cambiar las cosas. Así, muchas ideas han surgido, en muchos ámbitos diferentes, basadas en el reciclaje para reducir los residuos, concientizando la población y las autoridades de la situación.
De hecho, hemos empezando confiar en nuestras ideas al construir el aula infantil de Pilote Barre con botellas de plástico colectadas en el pueblo. Hoy la radio comunitaria de Gandiol está en obra: se está construyendo gracias a neumáticos llenos de residuos y tierra. Después del éxito de esa idea para hacer revivir los residuos, hemos visto que hay menos de ellos en la comuna. Así que seguimos pensando para encontrar más respuestas a esa situación e invitamos a todo el mundo y toda la población de Gandiol a luchar contra ese flagelo.